La icónica pinacoteca londinense se caracteriza por su gratuidad y exquisitez de arte europeo.
Por Guillermo Garrido
La National Gallery de Londres, emblemática institución británica, cumple dos siglos de creación de lazos entre la sociedad y el arte y de inspiración a artistas. “Una casa abierta” a todos, según define su director, Gabriele Finaldi, a EFE antes de su gran fiesta de cumpleaños.
Todo comenzó con una simbólica exposición de 38 obras de arte un 10 de mayo de 1824, de los cuadros adquiridos por el Gobierno británico a John Julius Angerstein, un reconocido hombre de negocios, mecenas y coleccionista de arte de aquella época.
La muestra fue en el hogar de Angerstein, ubicado en el número 100 de la prestigiosa Pall Mall londinense. El evento supuso después una inesperada efeméride en nuestros días.
“La National Gallery tiene una relación especial con el público”, afirma a EFE Finaldi en perfecto español tras su reconocida etapa en el Museo del Prado (2002-2015).
Pinturas de la colección se estudian en la National Gallery de Londres. Foto: EFE | Neil Hall.
La icónica pinacoteca londinense se caracteriza por su gratuidad y exquisitez de arte europeo: desde Rembrandt, pasando por Diego de Velázquez hasta llegar a Vincent Van Gogh y Claude Monet.
“Es una casa abierta que acoge a artistas de toda Europa, visitantes de todo el mundo e inspira a la gente que viene aquí, incluso a los artistas.”, sostiene su director a los pies del lienzo en que se ha convertido la fachada las próximas dos noches con la proyección de una selección de las más de 2.600 pinturas que alberga en su interior.
Cumpleaños bicentenario
En un año lleno de eventos especiales, la fiesta comienza este fin de semana, con el ‘Big Birthday Party’ y la música está a cargo del reconocido pianista Jools Holland, que abrirá esta noche con un concierto en el interior de la galería.
Holland cederá el testigo a la violinista y compositora Anna Phoebe, que hará lo propio en la sala dedicada al flamenco Rubens, mientras que el Coro de Voces Contemporáneas de Londres actuará en un escenario sin precedentes, entre las pinturas paisajísticas de William Turner y John Constable.
La diversidad de la música electrónica se cuela también en las amplias salas de la Galería, con varias sesiones entre las que destacan Hinako Omori o Madam X.
“Retrato de Arnolfini”, del artista holandés Jan van Eyck, en la National Gallery de Londres. Foto: EFE | Neil Hall.
El cumpleaños se celebra asimismo en otras partes del Reino Unido con la exposición gratuita de, entre otras obras, ‘Dama tocando el virginal de pie’, de Veermer, en la Galería Nacional de Edimburgo; ‘Los Paraguas de Renoir’, en el Museo y Galería de Arte de Leicester o ‘La Venus del Espejo’, de Velázquez, en la Galería de Arte Walker de Liverpool, cedidas por la institución.
La Galería guarda el otoño para el gran Van Gogh, coincidiendo con un siglo de su presencia con ‘Los Girasoles’ y ‘La Silla’. “Es la primera vez que se celebra a Van Gogh”, expresa Finaldi.
Otro de los grandes momentos será la reinauguración en 2025 del Ala Sainsbury, “con una nueva entrada para el público, y una nueva disposición de obras en toda la superficie de la National Gallery”, revela su director.
El tercer siglo
Finaldi y su equipo son los encargados de la andadura en su tercer siglo de la National Gallery, “amada por muchísimas personas, no sólo en Gran Bretaña, sino en todo el mundo”, expresa entre “una gran emoción”.
“Creo que la historia del pasado nos da indicaciones también para el futuro”, reflexiona el director, quien deja unas breves pinceladas al respecto.
Sin perder la distinción, la colección tiene que seguir creciendo, “queremos trabajar con artistas contemporáneos, buscar nuevas formas de incorporar al público, las nuevas generaciones tienen que encontrar entusiasmo, eso es un reto”, sostiene.
El desafío pasa por utilizar “las nuevas tecnologías de formas muy interesantes, que acerquen la gente al arte. La National Gallery nace como una fuente de inspiración para artistas también, y es muy importante que siga”, destaca su director.
“Muchos de nosotros, me incluyo yo mismo -prosigue-, hemos crecido con la National Gallery desde pequeñitos, forma parte de la fibra de nuestra vida. Espero que en doscientos años podamos seguir diciendo que ha seguido haciendo esto”.
EFE.